Hace unos días nos
enterábamos de que la infanta Cristina era imputada en el caso Nóos. Para
muchos ha sido una alegría, para otros, una sorpresa, y para mi, simplemente ha
sido un hecho elocuente. Ahora, parece que nuestra infanta no va a recurrir, de
modo que esto significa que dará la cara. Bueno, y yo, pensando sobre esto,
dando vueltas a las cosas que he leído, llego a la sencilla conclusión de que
no entraría en cabeza humana ninguna otra decisión.
Ya es hora de que se
nos empiecen a dar explicaciones, de que se demuestre ese viejo dicho,
retrógrado e inverosímil, que dice que todos somos iguales ante la justicia.
Desde luego, tener que escuchar este tipo de comentarios, no es más que una
ofensa para los ciudadanos que cumplimos la ley y que vamos por la vida dando
el primer paso con el pie derecho.
Todos iguales...ni el
mismo José Mota podría hacer una parodia más buena que esta frase. Pero tampoco
me voy a poner negativa, ya que con esta noticia hemos subido un peldaño de tan
larga escalera.
Ahora sólo quedan dos
cosas, que se den al pueblo las explicaciones precisas y que, realmente, la
justicia sea igual para todos. Y cuando digo esto, es porque la película no
consiste en crear un ensañamiento con la hija del rey, sino en tomar este caso
como un ejemplo de todos aquellos que siguen estando tapados y que aún
desconocemos.
Porque si algo si
tenemos claro los españolitos es que nuestros políticos, grandes empresarios, o
"entes superiores", siempre tienen un pequeño "error"
oculto. Igual tenemos suerte y resulta que el 2014 es el año en el que se
empieza a tirar de la manta y a dejar a más de uno desnudo. Sí, sé lo que
estáis pensando: "es improbable", pero bueno, la esperanza nunca se
pierde. Como dice el anuncio de Campofrío: "que nadie nos quite nuestra
manera de disfrutar la vida". Y yo añado: "que nadie nos quite
nuestra frágil esperanza de quitarnos de en medio a los corruptos". Ya
iremos viendo cómo se resuelve este caso y en qué lugar queda nuestra
monarquía. Que Dios reparta suerte a todos los que la necesiten y a los que no
también. Hagan sus apuestas...
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